Seguimos recorriendo con nuestra Cámara Ambulante las fincas cafeteras de Medellín. Esta vez llegamos hasta la parte alta del barrio La Sierra en la comuna 8 donde encontramos 15 familias dedicadas a la cosecha de este grano.
De los más de 520 caficultores que tiene Medellín, encontramos en la ladera alta del barrio La Sierra, a Raúl uno de los cultivadores de café que desde hace más de una década se dedicó a sembrar y recoger el grano en esta zona del oriente de la ciudad.
En La Sierra, barrio estigmatizado por la violencia en los últimos años, son más de 40 familias las que se dedican a sembrar y cultivar granos de café y quienes se han encargado de transformar sus montañas y de demostrarle al mundo que en este sector, las acciones delictivas fueron cambiadas por la agricultura y por el amor a la caficultura.
Madrugan a consentir las más de 60 mil matas de café sembradas en La Sierra, recogen el grano o la cereza, lo encestan y lo secan, caminan con los bultos hasta 2 kilómetros para poder entregárselo a quien lo distribuye.
Estos caficultores son acompañados y asesorados por expertos y baristas que aparte de dignificarles el oficio, les generan mayores ganancias y hoy se encargan de vender y ofrecer su producto en Medellín, Colombia, Bélgica e Inglaterra.
Se declaran felices cultivando esta tierra que muchos siguen llamando peligrosa, aseguran que La Sierra es un barrio de gente honesta, campesina y trabajadora y sonríen con orgullo, exclamando que cultivan el mejor café del mundo.
Según la Alcaldía de Medellín, el cultivo de café aporta al sector:
el 43 % del sector agrícola de la ciudad y se estima que hay 520 caficultores; por eso, José y Minerva, añaden que en la ciudad se cultiva y toma el café más rico del mundo.
