La Alcaldía de Medellín adelanta una campaña entre todas las comunidades, en particular las de los sectores más golpeados por la inseguridad (el centro incluido), en el sentido de que los ciudadanos respondan a la pregunta:
“¿Y usted qué pone por la seguridad de Medellín?”.
Nadie lo niega: en la estructura de Estado y ciudadanos, gobierno y gobernados, la lógica es esperar a que las autoridades respondan por la seguridad de las personas, y más en centros urbanos con conflictos sociales hondos como lo son los nuestros, como lo ha sido Medellín que es terreno muy notable de dolor, luces y sombras.
Mas en una Nación donde los conflictos son particularmente complejos, y cuando lo que al parecer se necesita es una ley que no sólo haga que las leyes que hay se cumplan sino que se cumplan bien, es pertinente, y sobre todo necesario, buscar entre los ciudadanos qué es lo que pueden poner, y que en efecto lo pongan.
Por la seguridad ―la de todos― uno no puede poner policías, ni plata, ni normas, pero sí puede poner actitudes, digamos, esclarecidas.
Uno no puede entapizar toda la ciudad, pero sí puede calzarse unos zapatos; uno no puede administrar la justicia, pero sí puede ser justo… Uno no puede luchar por la seguridad de la ciudad entera, pero sí puede ayudar a luchar por la seguridad de la cuadra.
Luis Alirio Calle
@LuisAlirioCalle