En un especial mensaje de año nuevo se convirtió el discurso del jefe de los jesuitas en Colombia, padre Francisco de Roux. “Paren esa guerra y tengan el valor de venir aquí a conversar de paz con todos nosotros”, les dijo a quienes conversan en La Habana, Cuba.
Las palabras de Francisco de Roux son las del reciente Foro sobre Desarrollo Agrario que, como lo señaló Patricia Lara en su columna de El Espectador, fueron ignoradas por la prensa.
“Lo que está en el fondo de esta discusión es la convicción de que el desarrollo es la gente”, les dijo el padre de Roux.
No olvidemos que el desarrollo agrario y la equidad en el campo es uno de los temas básicos del nuevo acercamiento entre el gobierno y la guerrilla.
Advirtió de Roux: “El desarrollo no son los millones de toneladas de aceite de palma que se extraigan, ni los de azúcar de caña, ni los de carbón arrancados al territorio; eso puede ser un medio para el desarrollo o un medio para destruir al ser humano”.
Y les habló de la dignidad, en particular la del dolor de las víctimas: “La dignidad es la experiencia profunda de que importamos como personas, como familias, como pueblos. No le debemos a nadie la dignidad: ni al Estado ni al Ejército, ni a las Farc ni al Eln, ni a ningún político ni a ningún empresario que nos dé empleo”.
Por ella entonces, advirtió, es preciso separar la guerra de la política, aquí y ahora.
Luis Alirio Calle
@LuisAlirioCalle
