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Las zonas verdes de una Unidad Residencial de Robledo se convirtieron en una especie de campo minado para los caninos, que día a día se juegan la vida al pisar el pasto pues en cualquier momento podrían ingerir veneno. En este lugar. Loky, Channel, que estaba esperando un cachorro, y Polo, fueron víctimas de la intolerancia y la falta de humanidad.
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Pero Jaky logró ganarle la batalla a la muerte. 12 perritos ya han caído en esta trampa. De estos, 5 peludos murieron y otros 7 tuvieron que ser hospitalizados.
Según residentes de la Unidad, esta situación viene sucediendo hace tiempo. Ellos tienen un mensaje para quien está detrás de esta masacre de caninos.
Quienes residen en esta unidad afirman que la Fiscalía visitará el lugar para iniciar las investigaciones correspondientes.
