Uno de los primeros testimonios desgarradores, de una joven madre que nunca pensó que un caso aterrador como el del presunto abuso sexual a su hijo menor de 4 años tocara a su puerta. Ella se enteró luego de que el mismo menor inocentemente le contara lo que supuestamente pasaba dentro del jardín.
Para el 30 de Junio hasta ahora empezaba el calvario de las madres que presumen que sus hijos fueron abusados sexualmente en este Jardín del Barrio Santa Cruz. Se conocieron las dos primeras dos denuncias y menos de 24 horas aumentaron a 14 y hoy a 10 días después de instaurada la primera alerta ante la fiscalía ya son 21 las familias que sufren el terror de un presunto abuso sexual. Hasta el momento solo 5 casos han sido confirmados por la fiscalía, a través de exámenes médicos legales
El desespero por una respuesta y por buscar justicia hizo que varios grupos sociales se unieran a este clamor y apoyaran una manifestación al frente de este jardín. Eucaristías y velatones hicieron parte de la presión de la comunidad y las autoridades para que el sospechoso cayera.
las luces de la esperanza se encendieron y con la ilusión de tal vez una ayuda divina, familiares acompañaron varias noches de incertidumbre y oración.
Para las familias afectadas en este caso, la investigación fue lenta, un calvario que tuvieron que padecer, Un viacrucis que para algunos solo terminará cuando el presunto agresor fuera capturado. El ICBF comparte el sentir de las familias y asegura que la investigación y la atención a las familias debió ser más ágil.
La espera terminó y ya se dio la captura de Alias Manolo, para algunas madres la lucha hasta ahora comienza, su vida, su hogar y sus hijos no volvieron a ser los mismos y nada podrá reparar el dolor que deja la huella imborrable del abuso. Para ellos es solo un capítulo más de una historia con heridas difíciles de sanar.
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