Más de 35.000 estudiantes en Medellín reciben acompañamiento para no abandonar la universidad. Tres instituciones públicas y la Agencia de Educación Superior de la ciudad han entregado cientos de herramientas, entre ellas, préstamo de equipos, tarjetas sim card y fortalecimiento de aptitudes.
Garantizar la permanencia educativa durante la pandemia es ahora uno de los principales retos de las universidades. Hasta la fecha 35.970 estudiantes en Medellín han recibido herramientas para la continuidad de sus estudios y evitar que al regreso, las aulas de clase luzcan vacías.
Gracias a 144 egresados, el ITM ha realizado tutoriales y ha prestado computadores y más de mil tarjetas sim con datos. El Pascual Bravo implementa herramientas para el aprendizaje y acompañamiento permanente a sus estudiantes y docentes, el Colegio Mayor de Antioquia creó una experiencia interactiva que estimula procesos cognitivos y también facilitó módems de datos de acceso a internet y portátiles para universitarios de escasos recursos.
Los esfuerzos se enfocan en estrategias para afianzar habilidades, competencias y motivación ante los nuevos procesos de formación.
