La habilitación de la calle 9A sur para peatones y motociclistas cayó de anillo al dedo para los habitantes de Rodeo Alto que se vieron afectados por el movimiento en masa que se presentó en Atavanza, pues ahora no tienen que tomar el camino largo para llegar al otro lado, y sus tiempos de traslado se han reducido hasta en 15 minutos.
"Que poderío porque anteriormente me tocó pasar por ese puente bien peligroso para poder coger el carro para poder ir donde el médico." expresó Olga Osorio, una de las habitantes de Rodeo Alto.
Los comerciantes de la zona también afirman que este paso ha sido beneficioso para sus negocios.
"Es bueno porque hay mucha gente que necesita domicilio, necesita comer, necesita sus cositas y al no estar abierta la vía se imposibilita mucho la necesidad de la personas." dijo el domiciliario, Juan Rodríguez.
Los conductores de vehículos no ven la hora de que ellos también puedan contar con una vía.
"Sobre los carros están muy preocupados porque hay mucha gente que trabaja con los carros, otros tiene empresa y no han podido salir de aquí." dijo Antonio Restrepo, consejo de administración de Atavanza.
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Por su parte la firma contratista avanza en la demolición del muro de contención y los bomberos y personal de la secretaría de Movilidad hacen presencia en la zona para garantizar la seguridad de transeúntes y motociclistas que se movilizan por esta calle.