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Hace más de dos años se viene recrudeciendo el conflicto urbano en Bello. En reiteradas oportunidades hasta las autoridades nacionales han visitado este municipio para contrarrestar las bandas criminales.
Este territorio es el escenario de más de 10 grandes bandas, algunas de ellas con prontuarios criminales de hasta 25 años. Con las estrategias de seguridad se ha logrado capturar a los principales cabecillas, sin embargo, los mandos son sucedidos por los subalternos, quienes también ingresan a los listados de los más buscados.
Por todo esto, el Gobierno Nacional ofreció recompensas de hasta 50 millones de pesos. La prioridad, según las autoridades, es encontrar a Johnny Alexander Ramírez, alias ‘El Diablo’; Andrés Felipe Rodas, alias ‘Yervas’ y Juan Fernando Álvarez, alias ‘Juan 23’. Así como los delincuentes conocidos con los alias de ‘Perica’, ‘Sebas’, ‘Ruíz’, ‘El Gordo’, ‘Trompón’ y alias ‘Yonier, quienes hacen parte de los grupos Pachelly, Los Chatas y El Mesa.
Las autoridades saben el accionar criminal se ha enfocado en la extorsión a transportadores y domiciliarios. La ciudadanía en general y los comerciantes no solo padecen estas presiones sino que son testigos de la lucha por el territorio y el control del microtráfico de estas estructuras. Hasta mil personas están vinculadas a estas actividades.
Sumadas a las estrategias para fortalecer los mecanismos de seguridad ciudadana, al menos ocho mil bellanitas conforman las redes de participación cívica en esta población del norte del Valle de Aburrá.
