Llegamos con nuestra Cámara Ambulante hasta zona rural del corregimiento de Palmitas en el occidente de Medellín donde encontramos a Emilio Muñoz, un hombre con 100 años de edad y una memoria envidiable, declama y es la alegría en las fiestas del hogar. Esta es la historia de Emilio.
Entre las veredas La Volcana y Colimocha del corregimiento de Palmitas en el occidente de Medellín está la finca “Los Mangos” donde por más de un siglo de vida Emilio vivió de la agricultura y la ganadería. Es un hombre alegre, dicharachero y con una memoria envidiable.
A menos de un mes de cumplir 100 años de vida, este campesino, padre de doce hijos, nueve mujeres, 45 nietos y 64 bisnietos y cinco tatarabuelos es la alegría de este hogar, no hay fiesta o reunión familiar donde no le pidan que declame a los asistentes o que baile.
Siempre está rodeado de sus hijas y nietas, lo consienten y acompañan a visitar sus santos, que, según él, lo han mantenido vivo y sano por un siglo de vida. Sus hijas relatan que es un padre amoroso, respetuoso y un ejemplo de ser humano, por eso, será reconocido por la Alcaldía de Medellín en el mes del campesino.
No hay hora del día que no suelte una carcajada, un chiste o un poema, con los álbumes familiares recuerda a cada uno de los integrantes de su familia y pide que en junio cuando cumplirá años, todo su grupo familiar lo rodee en torno a una eucaristía y música de cuerda que es su otra pasión.
