Bogotá, 11 oct (EFE).- El Gobierno colombiano reafirmó al poder legislativo que no habrá un alto en fuego hasta lograr un acuerdo final en las negociaciones de paz con las Farc que comenzarán en Oslo la semana próxima.
El alto comisionado para la Paz y miembro del equipo negociador del Gobierno, Sergio Jaramillo, confirmó esta decisión a las Comisiones de paz del Senado y de la Cámara de Representantes.
Jaramillo se reunió el miércoles con estas comisiones del Congreso para hablar de asuntos relacionados con el diálogo del Gobierno con las Farc, que empezará oficialmente el 17 de octubre.
El copresidente de la Comisión de Paz del Senado, el liberal José Joaquín Camelo, explicó que el Gobierno se mantiene en los términos del llamado "Acuerdo general para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera".
Este documento fue suscrito por las partes el pasado 26 de agosto tras seis meses de conversaciones secretas en La Habana que se consideran la primera fase del proceso.
"Es un acuerdo muy serio que establece tres fases, la última de las cuales será la del fin del conflicto", y ese será el momento para el cese el fuego, agregó Camelo.
Jaramillo expresó a los congresistas que para el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos la segunda fase del proceso, que comenzará en Oslo, "es muy importante", dado que del éxito del diálogo formal dependerá el cese de hostilidades.
La tercera fase será la implementación de los acuerdos alcanzados y se llevaría a cabo sin ataques armados por ninguno de los dos actores del conflicto.
Debe ser una declaración "bilateral y definitiva", según establece el acuerdo de La Habana, que también incluye en esta etapa la dejación de armas por parte de los rebeldes, entre otros asuntos.
El senador Carlos Baena, del movimiento cristiano Mira y quien también se reunió con Jaramillo, indicó que el alto comisionado "no profundizó" en esas cuestiones cruciales.
Pero sí dejó claro que "antes del acuerdo final no habrá cese de hostilidades", continuó.
"Es en la fase tres cuando se dará el acuerdo final, en la que podrá declararse el cese el fuego", según Baena. No obstante, un "suceso extraordinario" que fuera favorable durante el transcurso de las negociaciones podría justificar anticipar un alto el fuego, matizó el senador Camelo.
En la reunión del miércoles los parlamentarios presentaron al alto comisionado para la Paz las iniciativas con las que el Congreso acompañará, aunque al margen, las negociaciones, a cuya mesa harán llegar recomendaciones o sugerencias.
Una de las propuestas de estas comisiones es la conformación de mesas de trabajo en ocho regiones colombianas, en las que participarán movimientos sociales, agrupaciones de minorías étnicas y organizaciones no gubernamentales.
"El Gobierno respalda esta iniciativa y acepta que su responsabilidad está en cabeza de las comisiones de paz del Congreso", matizó también el copresidente de la Comisión de Paz de la Cámara Baja y representante del izquierdista Polo Democrático Alternativo (PDA), Iván Cepeda.