Cartagena (Colombia), 22 ene (EFE).- La Policía Nacional de Colombia decomisó en las últimas horas una carga de 3.826 kilogramos de cocaína que supuestamente pertenecía a la banda criminal de Los Urabeños y que iba a ser enviada al puerto mexicano de Veracruz, para que la recibiera el cartel de Los Zetas.
El director de la Policía Nacional, el general José Roberto León Riaño, explicó hoy en una rueda de prensa que la droga, distribuida en paquetes similares a ladrillos, era colocada en bolsas con "glicerina ups" líquida, en una modalidad que denominó "plexitank".
"Los delincuentes habían contaminado la base de este cargamento, cada una de estas bolsas" con el estupefaciente, que según explicó el alto mando está valorado en mil millones de dólares.
Cuando los integrantes de la unidad de Antinarcóticos revisaron el contenido de las bolsas del producto farmacéutico, se percataron de que tenía "unas formas irregulares que no eran características de ese tipo de empaque".
La institución identificó a Los Urabeños como a los dueños de la droga por los logotipos que aparecían en algunos de los paquetes, que según dijo eran una triple equis, un signo de interrogación y el dibujo de un motorista.
Esta banda narcotraficante de origen y estructura paramilitar ha protagonizado en las últimas semanas luchas con el grupo rival de Los Rastrojos que han dejado decenas de muertos en Buenaventura (suroeste) y en Antioquia (noroeste).
"No tienen relación las muertes con la incautación de la droga", consideró el alto mando policial al señalar que la Policía ha tomado "medidas" para evitar que se produzcan más "retaliaciones".
"El centro de acopio era Urabá (un golfo ubicado al norte de Antioquia, vecino a Panamá y en el mar Caribe), y posteriormente era enviada a distintos puertos", agregó León Riaño.
Según dijo, esta droga "pertenece" al jefe máximo de la organización, alias "Otoniel", y a "Gavilanes", a quien se le acusa de la autoría intelectual del sonado asesinato de dos estudiantes bogotanos en el norte del país en 2011, por quienes ofreció una recompensa que no especificó.
León Riaño comentó que el "modus operandi" para esconder la droga cambia constantemente y agregó que en los operativos de lo corrido del año, cuando se han decomisado 8 toneladas, se ha detectado que los cargamentos constan de entre 1.000 y 2.000 kilogramos.