El proyecto de ley destinado a regular el uso adulto del cannabis en Colombia fue rechazado en su último debate en el Congreso de la República, y no logró avanzar hacia la aprobación. Esta iniciativa, que pretendía introducir cambios significativos en la legislación, alcanzó un hito histórico al superar exitosamente 7 de los 8 debates requeridos. Sin embargo, lamentablemente, sufrió un golpe final que frustró su posibilidad de convertirse en una realidad, al menos durante este periodo legislativo que concluyó el 20 de junio.
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La propuesta buscaba regularizar el uso del cannabis de manera responsable, teniendo en cuenta los aspectos de salud y bienestar de la población adulta. Entre los objetivos se encontraba establecer un marco legal para el acceso controlado y seguro al cannabis, promoviendo su uso responsable y minimizando los riesgos asociados.
Feria sobre cannabis medicinal en Medellín
A lo largo de los debates, se presentaron argumentos a favor y en contra de la regulación del cannabis, especialmente en relación con los efectos que puede tener en la salud de los consumidores. Aunque existen evidencias científicas que respaldan el uso medicinal del cannabis en el tratamiento de diversas condiciones de salud, como el alivio del dolor crónico o los trastornos neurológicos, persistieron preocupaciones sobre los posibles efectos adversos y el impacto en la salud pública.
La regulación del cannabis de uso adulto no pasó el último debate
A pesar de los avances logrados en los debates anteriores, el proyecto de ley no pudo superar la oposición suficiente en el último debate, lo que llevó a su hundimiento. Esta decisión representa un revés para aquellos que esperaban una regulación más amplia y moderna en relación con el uso del cannabis en Colombia.
Es importante destacar que la discusión sobre la regulación del cannabis de uso adulto en el país no se agota con este resultado. Es probable que en futuros periodos legislativos se retome la discusión y se presenten nuevas propuestas para abordar esta cuestión desde una perspectiva de salud pública y bienestar social.
La iniciativa legislativa enfrentó un panorama desfavorable para su aprobación, generando posturas divididas tanto entre sus defensores como entre sus críticos en el ámbito legislativo. En la votación final, la propuesta obtuvo solo 47 votos a favor, quedando a siete votos de alcanzar la mayoría necesaria. Por otro lado, hubo 43 votos en contra y 16 legisladores optaron por no emitir su voto
