Conocimos con nuestra Cámara Ambulante una historia de unión musical y esperanza de vida en medio del exilio. Un grupo de 40 músicos venezolanos encontró en Medellín un refugio artístico en la Orquesta Sinfónica de Eafit y hoy tocan juntos. Esta es la historia.
De los 1.400.000 venezolanos que han llegado a Colombia en los últimos 2 años, cerca de 96.000 mil están en Antioquia y de estos, 75.000 mil radicados en Medellín. Conocimos a Luis y Luisa que por culpa de la crisis humanitaria en su país, arribaron a la ciudad, aunque vivían en estados diferentes eran viejos conocidos y músicos los dos. En Medellín encontraron un oasis de tranquilidad lejos de sus familias y una nueva oportunidad para hacer lo que los apasiona, música.
Este encuentro musical y de amistad fue gracias a la iniciativa de 3 músicos profesionales y docentes que se dieron a la tarea de buscar entre los venezolanos que han ido llegando a la ciudad, artistas profesionales y en menos de un año, armaron la Orquesta Filarmonía Gran Colombia, que reúne a más de 42 filarmónicos venezolanos.
Luisa es percusionista, llegó hace 2 años a la ciudad y cuando creyó que su salida de Venezuela la alejaría de su gran pasión, la música, se reencontró con Luis y otros músicos venezolanos y hoy disfrutan de la fusión con la Orquesta Sinfónica de Eafit que abrió las puertas para esta unión artística y musical.
Ya tuvieron el primer concierto y compartieron escenario con otros 45 artistas de la sinfónica universitaria y proyectan mantener esta fusión que devolvió las esperanzas de hacer música y de reencontrarse entre instrumentos y partituras con compatriotas que también huyeron buscando bienestar lejos de su país.