Este 9 de agosto inician los vencimientos para presentar la declaración de renta y varios ciudadanos se han encontrado este año con la sorpresa de que les tocará pagar. A qué se debe esto, aquí se los explicamos.
2018 es el año donde las personas naturales estrenarán los cambios implementados por cuenta de la reforma tributaria de 2016 para la declaración de renta. Eso significa que muchas personas que en 2017 pasado cumplieron la obligación y no tuvieron que pagar o que e incluso encontraron un saldo a favor, esta vez es posible que les toque tributar.
El principal cambio y el origen de que muchos ahora sí tengan que pagar en la declaración de renta es que ahora los montos de deducciones y rentas exentas no pueden superar el 40 % del total de los ingresos.
La reforma también cambio el sistema cedular que clasifica los ingresos según su origen de la siguiente manera.
- Rentas de trabajo: incluye salarios, prestaciones sociales, viáticos, comisiones, honorarios, entre otros.
- Rentas de pensiones: pensiones de jubilación, riesgos laborales, invalidez, vejez, sobrevivientes.
- Rentas de capital: incluye intereses, arrendamientos, regalías, rendimientos financieros y explotación de propiedad intelectual.
- Rentas no laborales: se incluyen en esta cédula todos los ingresos que no clasifiquen en ninguna de las otras cédulas y aquellos ingresos que no cumplan con la definición de compensación por servicios personales.
- Rentas de dividendos y participaciones: ingresos que provienen de sociedades y entidades nacionales y extranjeras.
Este año deben presentar la declaración quienes el año pasado registraron ingresos superiores a 44 millones 603 mil y quien al 31 de diciembre tenía un patrimonio superior a 143 millones 366 mil. También si usted realizo consumos con tarjeta de crédito, compras con cualquier medio de pago o consignaciones bancarias por 44 millones 603 mil pesos.
