Varios sectores económicos del Valle de Aburrá han visto afectada la prestación de sus servicios por las jornadas de protesta. Uno de ellos es el Metro de Medellín, que ha tenido que suspender la actividad en algunas líneas, e incluso el servicio en general.
Durante las jornadas en las que el Metro de Medellín ha tenido que suspender parcial o totalmente el servicio, aproximadamente el 20% de sus pasajeros se han visto perjudicados al no poder hacer uso de las diferentes líneas.
Las directivas del sistema de transporte insisten en que la decisión busca preservar la seguridad de la infraestructura del Metro, así como la de sus usuarios.
El Metro de Medellín reiteró que las suspensiones del servicio en algunas estaciones o el cierre de la operación de manera anticipada es acordado previamente con las autoridades de seguridad desde el Puesto de Mando Unificado.
Al tiempo, el sistema de transporte no escatimó en enviar un nuevo llamado a los manifestantes para evitar a toda costa vandalizar la infraestructura del Metro y afectar la movilización de los pasajeros.