Bogotá, 4 enero (EFE).- Un menor murió y otros tres están heridos a causa de balas perdidas disparadas durante las celebraciones de Fin de Año en Colombia, informaron hoy fuentes sanitarias y policiales.
El caso que más conmoción ha provocado es el del menor Esteban Giraldo, de seis años, quien fue víctima de una bala perdida en la cabeza en la noche del 1 de enero y falleció esta madrugada tras permanecer varios días en coma inducido.
El director del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, Juan Ángel Isaac Llanos, confirmó a los medios locales la muerte del niño, quien vivía en la localidad de Soacha, aledaña a Bogotá.
Por su parte, el Fiscal General encargado, Guillermo Mendoza, calificó de "lamentable" el suceso en RCN Radio, al subrayar que hay una "responsabilidad penal" y que el autor del disparo que mató a Giraldo será acusado de homicidio.
Mientras, el vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, tildó de "salvaje" el comportamiento de las personas "que celebran con disparos al aire", al pedir la colaboración de la ciudadanía para dar con los responsables de las balas perdidas que han matado y herido a varios menores en estas fiestas de Año Nuevo.
De esos heridos, el más grave es un niño de cinco años que está ingresado en el Hospital San Vicente de Paúl de la ciudad de Medellín (noroeste).
El niño permanece en coma inducido, con pronóstico reservado, tras haber sufrido el impacto de una bala perdida en la cabeza durante las celebraciones de Año Nuevo en un barrio de Medellín, explicó a los medios Juan Pablo Guerrero, jefe de Pediatría del Hospital San Vicente de Paúl.
En Barranquilla (norte), un menor de 15 años resultó herido en el rostro a causa de una bala perdida, pero tras ser operado su estado no reviste gravedad, de acuerdo con la Policía Metropolitana de esta ciudad.
También está fuera de peligro un bebé de cinco meses que recibió una bala perdida en el abdomen en la madrugada del 1 de enero en Cali (suroeste), según la directora de urgencias del Hospital Universitario del Valle, Amanda García.
Por otro lado, la fiscalía investiga en Manizales (oeste) el fallecimiento de una mujer de 26 años que, al parecer, murió el 2 de enero cuando iba en un taxi por una bala perdida producto de un enfrentamiento entre policías y dos presuntos delincuentes.
El diario El Espectador publica hoy que, aunque no hay cifras oficiales al respecto, recuentos extraoficiales indican que anualmente se registran unas 300 víctimas de balas perdidas en Colombia, donde más de 21.000 personas fueron procesadas por porte ilegal de armas en los últimos cuatro años.
