Tres familias quedaron afectadas después de que un incendio consumiera sus casas en el barrio Juan XXIII. Bomberos Medellín controló las llamas y dijo que afortunadamente no se registraron lesionados.
Así fue el incendio que trajo consigo tristeza y destrucción a tres familias del barrio Juan XXIII, en San Javier, occidente de Medellín.
Aquí estaba la casa de Neila Acevedo, un hogar que después de 14 años de esfuerzo se lo llevó el fuego y lo redujo a cenizas. Su hija y sus dos nietas pudieron escapar de las llamas.
Marta había llegado a su casa a eso de las dos de la tarde, después de recoger a su hijo hospitalizado. Ella estaba en su cuarto cuando comenzó el incendio. Y, ante sus ojos, poco a poco, se derrumbó el sueño de haber construido su propia casa.
La casa de Alirio tampoco se salvó de las llamas, pues todos los electrodomésticos quedaron reducidos a cenizas, aunque agradece que ningún miembro de su familia salió lesionado.
Antes de que llegaran dos máquinas de Bomberos, los vecinos se llenaron de valentía y con baldes intentaron apagar el fuego. Luego de superada la emergencia, personal especializado del Dagrd inició la investigación para esclarecer las causas del incendio.