El Museo Casa de la Memoria fue la sede de graduación de las 60 víctimas que participaron en el curso “Espere” liderado desde la Secretaría de la No Violencia.
Doña Marta Correa cumplió años el mismo día que completó su proceso de reconciliación y perdón de la escuela en la que primero reconoció a sus victimarios. La primera vez la confundieron, vandalizaron su casa en Bello al amanecer, frente a sus hijos y la amenazaron . Eso la obligó a abandonarlo todo y migrar a Medellín, tratando de dejar esa historia atrás.
Pero la pandemia le traería un nuevo victimario. Su compañero sentimental transgredió su confianza y la hizo revivir odios y resentimientos, de los que hoy logró liberarse a través de la estrategia de perdón y reconciliación a la que se inscribió convocada por la Secretaría de la No Violencia.
El señor Jhon Jairo Arbeláez también participó del curso y encontró en el un mecanismo para poder compartir a otros estas herramientas con las que sigue sanando las heridas que dejó el desplazamiento forzoso del que fue víctima en 2002, cuando lo obligaron a dejar su vida en La Unión, para arrancar de cero en la capital antioqueña.
Como ellos, otros 58 participantes obtuvieron la certificación de esta primera escuela, que dejó un podcast y un registro fotográfico para no olvidar.