Consternados y en alerta, así se encuentran los habitantes de San Andrés de Cuerquia, en el Norte antioqueño, luego de que dos hermanos de 6 y 8 años resultaran heridos al caer en un campo minado en la vereda La Cordillera, un hecho que ha encendido las alarmas sobre la presencia de explosivos en zonas rurales.
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El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, manifestó su preocupación por la falta de capacidad operativa de la fuerza pública para enfrentar a las estructuras delictivas que mantienen en vilo el orden público en el territorio, dificultando las labores de control y seguridad.
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Ante esta situación, las autoridades solicitarán el apoyo de organismos internacionales y exigirán al ejército adelantar de manera urgente operativos de ubicación y desminado, con el fin de proteger a la comunidad.
