Pese a la petición del Procurador General y de las 15 mil quejas y solicitudes de los usuarios de Medimás, el superintendente de salud, Norman Julio Muñoz, descartó intervenir a la EPS porque la entidad que dirige ya adelanta un seguimiento en protección de recursos, atención al usuario y formalización de la red pública, este último con intenciones de acuerdos con 1.500 prestadores de salud.
La Asociación Colombiana de Clínicas y Hospitales asegura que más del 80% de los centros asistenciales vinculados no tiene contratación con Medimás.
Dicha situación similar pasa con los hospitales públicos; En Antioquia, por ejemplo, el 70% de los municipios sólo atiende urgencias a los usuarios de la EPS.
Ambos sectores, tanto público como privado, aseguran desconfiar del modelo contractual que ofrece Medimás, toda vez que Cafesalud y Saludcoop no pagaron las deudas pendientes.
Los avances del plan de seguimiento de la Supersalud que inició con la operación de Medimás serán expuestos en próximos días a la Procuraduría General.