La solidez del sistema financiero colombiano es una de las razones por las que la economía del país es estable y crece.
Esta fue la principal conclusión del Superintendente Financiero de Colombia (SFC), Gerardo Hernández, en la audiencia pública de rendición de cuentas realizada ayer.
En el evento, Hernández y varios de sus funcionarios, presentaron el informe de gestión agosto 2010 -julio 2011, donde destacaron los logros y retos generados luego de la implementación de varias estrategias.
En ese sentido, los resultados más importantes se relacionan con las medidas de protección del consumidor, y el seguimiento y divulgación trimestral de tarifas de servicios financieros.
El directivo resaltó que a julio el sistema financiero reportó 5 millones de tarjetas con chip entregadas, 158 mil datáfonos operando con ese sistema (todos en el país) y 3.500 cajeros automáticos que reciben estas tarjetas, sin contar los otros 4.000 que se adecuarán a diciembre.
Así mismo, el superintendente planteó que se están haciendo gestiones para definir un calendario que permita que en el 2014 “podamos tener una convergencia con las normas de contabilidad mundial”, aunque explicó que el reto además de financiero, es operativo.
Al respecto, el director de Investigaciones Económicas y Estratégicas de Bancolombia, Daniel Niño, aseguró que considera dentro de los logros, que la información llegue relativamente rápido al público, promoviendo la competencia, transparencia y fortaleciendo la capacidad de supervisión.
Los retos
Frente a los desafíos, Niño aseguró que falta entender el funcionamiento del sistema financiero por regiones, es decir, cómo crece la morosidad, el crédito, etc. Y además, conocer el desempeño operativo y regulatorio de las entidades financieras.
Respecto a la llegada de más bancos, Niño dijo que es porque “sienten que Colombia es un país con una estabilidad macroeconómica, que tiene un sector financiero sólido”. Y sólido, porque maneja muy bien sus riesgos de liquidez, crédito y porque ha logrado elevar su capacidad de manejar de manera inteligente las inversiones.
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