En un operativo fueron capturados doce integrantes de la banda El Ajizal que controlaba el microtráfico en Itagüí, sur del Valle de Aburrá. Un seguimiento con drones fue clave para las judicializaciones.
Las imágenes grabadas con drones evidencian cómo integrantes de esta banda venden estupefacientes al menudeo, llegando hasta sectores públicos o parques de Itagüí para entregarlas, como quedaron registrados con el seguimiento de drones de la Policía y una investigación de más de ocho meses.
Fueron capturados diez de sus miembros con orden judicial y dos más en flagrancia.
Las plazas de vicio tenían sus coordinadores y estaban ubicados en cuatro zonas de Itagüí como en la vereda Ajizal y el barrio La Hortensia. La banda instrumentaliza menores para la comercialización cerca de entornos escolares, según las autoridades.
Las rentas criminales de la banda El Ajizal alcanzan los 1.200 millones de pesos al año, por el tráfico de drogas.
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