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Bogotá, 19 may (EFE).- El presidente Juan Manuel Santos firmó hoy un decreto con el cual se adoptan medidas para combatir el robo de teléfonos móviles y que obliga a los compañías que operan en Colombia a crear bases de datos para compartirlas con sus filiales del exterior.
Un comunicado de la Presidencia de la República señala que los operadores de teléfonos móviles deben compartir esas bases para evitar que los equipos hurtados en Colombia se comercialicen en otros países.
En las bases de datos "negativas" deberán estar los Imeis (identificador internacional del equipo) de los teléfonos robados y hurtados, y en la base "positiva" los equipos habilitados legalmente.
El decreto también establece que la implementación y operación deberán ser asumidas por los proveedores del servicio.
De igual forma, estipula que cuando una persona reporta el teléfono como robado o extraviado será incluido en la base de datos "negativa", pero que al ser recuperado podrá ser nuevamente activado e incluido en la base de datos "positiva".
Para los aparatos comprados en el exterior, el decreto indica que para su activación en el país el usuario deberá demostrar la compra del equipo con facturas o demás documentos que demuestren su adquisición legal.
Por otro lado, el otro decreto regula la venta de equipos, al establecer requisitos específicos para su comercialización y señala que los comercializadores deben estar autorizadas por los proveedores o el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.
El robo de celulares es percibido por la población colombiana como uno de los mayores factores de inseguridad en los grandes centros urbanos.
El año pasado fueron hurtados alrededor de tres millones de móviles, según estimativos de la Policía colombiana.
Según un reporte de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), al cierre del 2010 se habían registrado 44.725.636 usuarios activos, lo que supone que 9 de cada 10 colombianos tienen un aparato.