Bogotá, 7 ago (EFE).- El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo hoy, al iniciar el último de sus cuatro años de mandato, que aspira a que el próximo Gobierno, entre 2014 y 2018, mantenga sus políticas, y afirmó que al país "hay que liberarlo de nuevo" mediante "una segunda independencia".
En el discurso de conmemoración de los 194 años de independencia de Colombia, el presidente se refirió de nuevo a la "reelección de sus políticas", sin confesar expresamente su posible voluntad de buscar un segundo periodo de Gobierno en las elecciones del 25 de mayo de 2014.
"Aspiro a que en un año exactamente, cuando Colombia inicie un nuevo mandato presidencial, se dé continuidad a estas batallas, a estas políticas construidas para el largo plazo", dijo el mandatario, que impulsa un diálogo de paz con la guerrilla de las FARC, en La Habana y busca hacerlo también con el grupo ELN.
Un 60 % de los colombianos rechaza una eventual reelección de Santos, según las encuestas.
Santos se pronunció por primera vez sobre una posible reelección de sus "políticas" en mayo pasado, cuando advirtió de que no haría el anuncio formal de su candidatura personal hasta noviembre próximo, seis meses antes de las elecciones, como lo establece la ley.
El jefe de Estado justificó que "el propósito de construir un país mucho más seguro, más justo y más moderno es ambicioso y no se agota en este periodo de gobierno, a pesar de los significativos avances que se han obtenido", que a su juicio "están cambiando para bien la vida de los colombianos".
El mandatario habló ante la jefatura militar y diversas personalidades en el monumento del Puente de Boyacá (centro-este), donde hace 194 años las tropas de Simón Bolívar libraron una batalla contra las españolas, en un hecho que se considera selló la independencia de la entonces Gran Colombia.
Santos ratificó la determinación de su Gobierno por continuar su proyecto en el cuarto y último año de gestión, sin tener en cuenta las críticas de la oposición, a la que acusó de haber tratado de "sembrar miedo y desaliento" con su "natural inquina" para frenar "los cambios progresistas".
"No vamos a abandonar el campo de batalla ahora que estamos tan cerca de la victoria sobre la violencia, la pobreza y el atraso. No es el momento de claudicar. Al país hay que liberarlo de nuevo", arengó.
Añadió que "llegó la hora de la segunda independencia, debemos independizarnos para siempre de la violencia que ha sido más regla que excepción en nuestra vida republicana, construyendo una paz definitiva".
El Gobierno de Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) iniciaron en noviembre de 2012 las conversaciones de paz en La Habana con las que pretenden ponerle fin a medio siglo de conflicto, proceso que ha logrado el primer acuerdo sobre los cinco puntos de la agenda.
Las conversaciones de La Habana cuentan con el auspicio de Cuba y Noruega y el "acompañamiento" de Chile y Venezuela, aunque muchos otros gobiernos y personalidades alrededor del mundo han expresado apoyo a las tentativas de pacificación en Colombia.