Esta Navidad, sin duda, será atípica para todos, pero, sobre todos, para los niños que aún no entienden bien la situación y querrán salir a jugar con los regalos que les traerá el Niño Dios.
Cómo decirle a un niño de 4 o 5 que el traído del niño Dios es una bicicleta, unos patines, un carro a control remoto o hasta una piscina inflable y que no puede salir a mostrarla ni utilizarla esa misma noche buena. Cómo explicarle que no se puede reunir con sus amigos ni con los familiares como lo hacía antes. Estas y otras preguntas deberán resolver esta noche los padres y, para ellas, tendrán que acudir a la explicación de que vivimos una nueva “normalidad”.
Será fundamental una buena conversación con sus hijos y ser claro con la realidad actual sin desviar su atención con mundos de fantasía. La idea es que el niño desde sus primeros años entienda qué está pasando.
La soledad y la distancia entre las familias también afecta de manera psicológica a muchos en estas épocas especiales y, según los expertos, la virtualidad será la mejor manera de no sentirse solo.