Analistas de geopolítica aseguran que la renuncia de Joe Biden no fue voluntaria sino forzada, y ahora la vicepresidenta deberá enfrentarse a Donald Trump en unas elecciones que puede ser de constantes ataques.
Eran múltiples las voces que le pedían al presidente Joe Biden DAR un paso al costado, desde pesos pesados del Partido Demócrata como Barack Obama, hasta medios como el New York Times por el notable deterioro del expresidente Joe Biden. Estado de salud que fue el talón de aquiles por donde recibió los ataques de sus contrincantes políticos.
Las elecciones por la Casa Blanca llega en un momento de tensiones mundiales por el conflicto en Gaza, en Ucrania, el cambio climático, las recesiones económicas en varios países y las polarizaciones políticas.
Aunque no se ha definido aún si la vicepresidente Kalama Harris asumirá las banderas del Partido Demócrata, es probable. Ella deberá sortear estos retos mundiales ante una figura imponente como la de Donald Trump.
Para el profesor Beckmann la eficiencia en la gestión es diferente a la percepción ciudadana sobre Joe Biden. Así que surge una pregunta, ¿hacia dónde podría inclinarse el electorado norteamericano?
En ocasiones anteriores a las mujeres candidatas no les fue bien, como en el caso de Hilary Clinton, pero esta vez podría ser distinto. El candidato del Partido Demócrata se elegirá en la Convención del Partido Demócrata en Chicago del 19 al 22 de agosto.
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