Desde que inició la cuaresma con la imposición de la ceniza, la venta de pescado ha aumentado en un 60 %, en las centrales de abastos de la ciudad.
Por ejemplo, en la Plaza Minorista los comerciantes ven un repunte importante en sus ventas.
A pesar de las medidas restrictivas los compradores no dejan a un lado la tradición de compartir en familia el almuerzo durante los días santos.
Para el Jueves y Viernes Santo se espera el aumento de compradores en la zona de pescadería de la Plaza. Pescados de río como la Cachama y el Bocachico están agotados, según los comerciantes.