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Esta ha sido una de las semanas más complejas para el orden público en Colombia y para el gobierno del presidente Gustavo Petro.
Las manifestaciones y los hechos que han derivado en las exigencias de los mineros, por ejemplo, en el Bajo Cauca antioqueño, y la situación que se salió de control en Caquetá por cuenta del enfrentamiento entre la fuerza pública y campesinos del municipio de San Vicente del Caguán, cobró la vida de dos personas y dejó destrucción a su paso.
Presidente Petro acompañó acto simbólico para homenajear al subintendente Arley Monroy
Precisamente, este 4 de marzo se llevaron acabo los actos fúnebres del subintendente de la Policía Nacional Arley Monroy, integrante del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAN), que hizo presencia en la protestas en el sector Los Pozos al frente a las instalaciones de la petrolera Emerald Energy, en Caquetá.
Las exequias del policía asesinado se realizaron en Bogotá, donde en imágenes compartidas por la presidencia de la República se puede ver a los familiares del subintendente y a la cúpula militar que rindió honores al uniformado.
Al lugar también asistieron el presidente Gustavo Petro, acompañado por la jefa de gabinete, Laura Sarabria, y el ministro de Defensa, Iván Velásquez.
El subintendente Arley Monroy, tenía 39 años y llevaba en la Policía cerca de 15 años de servicio, asimismo era padre y esposo, dejando, de manera lamentable, dos hijos.
Durante el acto fúnebre, la cúpula militar hizo un acto simbólico en honor al uniformado y acompañaron en caravana el féretro que será sepultado en el departamento de Boyacá.
Frente a lo sucedido, el presidente Gustavo Petro pudo hablar con el padre del subintendente Monroy, el señor Arquímedes Monroy, quien expresó en entrevista con la Wradio lo que le dijo el mandatario: “Que lo sentían bastante, que estaba de corazón con nosotros y que nos iba a acompañar. Estaba ahí dándonos moral”.
El padre del policía asesinado no compartió las declaraciones del ministro del Interior Alfonso Prada, al referirse a los hechos del jueves 2 de marzo, como 'un cerco humanitario'.
Imagínese un cerco humanitario con un muerto de por medio, eso no lo es, lo que es, es violencia porque hubo un secuestro, enfatizó Monroy padre.
Durante la instalación del Puesto de Mando Unificado en San Vicente del Caguán, también se dispuso de un momento de silencio por la muerte de uno de los campesinos en medio de las protestas.
