Una persecución de película por las aguas del Río Medellín terminó con la captura de un presunto jíbaro que intentó huir lanzándose al afluente con más de 8 mil dosis de basuco.
Pico y placa Medellín
Una persecución de película por las aguas del Río Medellín terminó con la captura de un presunto jíbaro que intentó huir lanzándose al afluente con más de 8 mil dosis de basuco.