Está claro que ir a un estadio es para disfrutar de un espectáculo y que solo se llega con la única idea de apoyar el equipo de fútbol de sus amores, hay familias, niños, adultos y gente que siempre quiere pasarla bien y allí no debe haber lugar para la intolerancia, el irrespeto y la agresión.
Lo que hoy pasó en el estadio 12 de Octubre en el compromiso entre Cortuluá y Deportivo Cali no se puede repetir, un intento de agresión a un puñado de profesionales que se preparan para sacar un buen resultado y que por cualquier circunstancia no se puede conseguir.
Un mal resultado por más complicado que sea no puede llevar a un grupo de hinchas a reaccionar de cualquier manera, poniendo en riesgo la integridad de los demás y sobre todo de jugadores y cuerpo técnico que quiere lo mejor para su equipo.
La gran mayoría de esta plantilla y el cuerpo técnico de uno de los más grandes y respetables clubes del fútbol colombiano como es el Deportivo Cali tiene que ser respaldado por su afición que tiene que demostrar que el apoyo así como se hace en los mejores momentos también en los instantes de flaqueza hay que demostrarlo y no acudir a la violencia para resolver un tema que no es de vida o muerte y que no deja de ser un deporte.
Mensaje directo para las hinchas del fútbol:
"Los mejores amigos se conocen en los peores momentos”.
Esta es la gran oportunidad para demostrar el respaldo para un equipo que hace 9 meses estaba celebrando un título bien ganado en la Liga de nuestro país y que está lleno de referentes como Mayer Candelo que alguna vez arrancó aplausos por sus buenas ejecutorias con la divisa verde y blanca y que hoy no puede ser maltratado simplemente por una mal resultado.
Está claro que en el futbol solo hay espacio para quienes quieren disfrutar un espectáculo, que la sana convivencia, y la tolerancia siempre tienen que estar presentes y que un mal resultado por ningún motivo debe llevar a poner en riesgo la vida y la integridad de los demás.
Desde esta tribuna hago un llamado a todos los que amamos el fútbol, para protegerlo y convertirlo en un deporte que siga generando Alegría, en un escenario lleno de paz y de respeto por quienes hacen parte de esta gran fiesta en la que muchos queremos estar.
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