Tras la elección del papa León XIV, se han conocido diferentes curiosidades sobre su vida personal y gustos que han sorprendido a creyentes de todo el mundo. Uno de ellos es el tenis, deporte que solía practicar en sus tiempos libres y del cual se considera aficionado.
Es tal la pasión del papa por el tenis, que conoce a los jugadores y se mantiene enterado de las competencias, como el Masters 1000 que se disputa en Roma con la presencia Jannik Sinner, uno de sus deportistas favoritos, quien quiso sacar un espacio para ir a visitarlo y tener un agradable momento.
El encuentro se dio en el Vaticano. Allí, Sinner y León XIV compartieron sonrisas, anécdotas y hasta algunas bromas que el santo padre le hizo al número uno del ranking ATP. También asistieron sus padres y el presidente de la Federación Italiana de Tenis, Angelo Binaghi, quien le mostró la Copa Davis ganada por Italia.
Finalmente, el tenista de 23 años le regaló una de sus raquetas al papa, quien de manera jocosa afirmó que con ella “lo dejarían participar de Wimbledon”.
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