Con cerca de cuatro décadas al servicio del Independiente Medellín, en las que estuvo como arquero y posteriormente como entrenador de arqueros y cuando ya se había retirado, “Ormeño” Gómez volvió a las canchas, pero esta vez a animar a su nieto en el Baby Fútbol.
Ormeño, ahora detrás de la reja, disfruta de su nieto Maximiliano, aunque su herencia no haya sido en la portería.
Por su parte, “Maxi” decidió ponerse los guayos que no usó su padre, hoy dedicado al canto y buscar destacarse escribiendo su propia historia.
Maximiliano hace parte del Equipo Dávila, en el Baby Fútbol, en el que integra el Grupo J, junto a La Alborada de Apartadó, Las Granjas y La Acord Antioquia
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