Le seguimos el paso al acto vandálico de las esculturas de la Plaza Botero. Nueve de ellas siguen manchadas, así como sus pedestales y parte del piso. Los ciudadanos reprocharon lo sucedido y las autoridades se concentran en cómo será la restauración.
Un día después del acto vandálico con pigmento industrial, así lucen las esculturas del maestro Fernando Botero en el Centro de Medellín. “Mujer con espejo”, “Perro”, “Cabeza” y 6 obras más, fueron manchadas con un químico que al tener contacto con el agua se torna de colores morado o violeta.
La sustancia, que aún es objeto de estudio, también manchó los pedestales, pisos y bancas en la Plaza Botero.
Lo complejo de este colorante es que su reacción es diferente con materiales como bronce, granito y cemento. 3 restauradores hicieron labores preliminares para entregar un reporte al Ministerio de Cultura y la Alcaldía de Medellín.
La identidad de las personas que cometieron este acto vandálico sigue siendo desconocida.
Las esculturas seguirán expuestas al público y serán restauradas, así como sus pedestales, cuando las autoridades en cultura lo autoricen.