En el municipio de Barbosa, en el norte del Valle de Aburrá, una mujer de 24 años adoptó una niña con síndrome de hidrocefalia y requiere con urgencia de un coche especial para mejorar la calidad de vida de su hija.
El nombre de la mujer es Jenny, quién tiene 24 años de edad y trabaja hace 7 años en el cuerpo de bomberos de Barbosa, en el norte del Valle de Aburrá y hace 27 meses realizó un viaje a Urabá donde a través de un hermano medio pudo conocer a María Camila, una bebé de 3 meses de nacida con síndrome de hidrocefalia.
No obstante, al llegar a Medellín un médico le diagnosticó a la menor que no hablaría, caminaría o sobreviviría. Sin embargo, mediante amor y mucha dedicación, la pequeña ha logrado superar todo diagnostico médico.
Finalmente, Jenny la mujer que está día a día al tanto de los requerimientos de la niña, argumenta que se encuentra en un continuo drama porque no tiene los recursos para proveerle a la niña un coche con adaptaciones para sostenerle la cabeza y tampoco de pañales ni cremas para sus terapias de crecimiento.