En estas fiestas, algunas personas desafortunadamente mezclan el alcohol con la conducción. Algunos son tan osados que recurren a sustancias y productos para alterar el resultado de la prueba de embriaguez. Aquí les tenemos los mitos más comunes.
Cuando se mezcla el alcohol y la conducción se produce un cóctel que puede ser mortal. Algunos conductores comen pan para alterar el resultado de la prueba de alcoholemia, mientras que otros se escudan en que consumieron confites de anís, enjuague bucal, helados o tortas envinadas cuando la prueba da positivo.
Ante estos mitos, la Secretaría de movilidad aclara que el laboratorio de toxicología es capaz de entregar un resultado sin alteración.
La invitación es a no consumir licor si va a manejar.
Y si usted es de los que cree que al siguiente no le marca, tenga cuidado.
Este año en Medellín se han realizado más de 18 mil pruebas de embriaguez. Más de 500 han dado positivo.