Como el patrullero Fernando Murcia y el soldado profesional José David Gómez fueron identificados los dos miembros de la fuerza pública que murieron en medio de la emboscada a una caravana de aproximadamente 100 vehículos, a la altura de Cañasgordas, que tenía como destino el Urabá antioqueño.
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Una de las personas que quedó atrapada en la zona, en medio del tiroteo, fue esta mujer que iba en uno de los vehículos que hacían parte de la caravana.
Por información que permita dar con el paradero de los autores intelectuales y materiales de este nuevo ataque a la fuerza pública las autoridades ofrecen una recompensa de hasta 300 millones de pesos.
En 5 días de presión armada en Antioquia, 4 personas han sido asesinadas y más de 100 vehículos han sido incinerados.
