Kabul, 30 dic (EFE).- Al menos 1.056 soldados del Ejército afgano murieron en acto de servicio durante el año 2012, debido sobre todo a la explosión de minas y bombas colocadas por los talibanes en las carreteras, informó hoy el ministerio afgano de Defensa.
Según un informe presentado en Kabul por el portavoz del ministerio afgano de Defensa, Zahir Azimi, "las minas y las bombas colocadas en las carreteras causaron más del 75 % de las muertes entre los miembros del Ejército Nacional Afgano".
"Nuestra vulnerabilidad a las minas es mucho mayor que la de los soldados extranjeros, pues estos disponen de un mejor equipamiento defensivo", señaló Azimi.
Las tropas afganas las conforman unos 195.000 soldados, que se han hecho cargo hasta el momento de la seguridad del 75 % del territorio nacional y, según el informe, esperan controlar la totalidad del país a finales de 2013, un año antes de lo previsto.
Los artefactos explosivos improvisados (IED, siglas en inglés) colocados en las orillas de las carreteras y activados por control remoto son uno de los métodos preferidos de los talibanes en su lucha contra las fuerzas de seguridad afganas e internacionales.
Desde el inicio de 2012, unos 398 soldados de las tropas extranjeras han fallecido, según datos del portal independiente icasualties.org, que contabiliza en torno a 3.245 los militares internacionales muertos desde la caída del régimen talibán en 2001.
Los insurgentes luchan por derrocar al Gobierno afgano y volver a instaurar un régimen fundamentalista islámico en el país similar al que hubo entre 1996 y 2001.