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Venecia (Italia), 29 ago (EFE).- El cineasta estadounidense Michael Mann, presidente del jurado de la sección oficial a concurso del 69 Festival Internacional de Cine de Venecia, afirmó que se guiará por los criterios de innovación y excelencia para conceder el León de Oro a la Mejor Película.
En la primera jornada del certamen cinematográfico italiano, Mann compareció en rueda de prensa junto a, entre otros, el presidente de la Bienal de Venecia (la organización responsable del evento), Paolo Baratta, y el director de "la Mostra", Alberto Barbera.
"No vemos el momento de empezar con la tarea de ser jurado. Este tipo de trabajo, es decir, poder ver nuevos trabajos innovadores, me llena de entusiasmo. Todos realizaremos esta tarea en cuanto cineastas, escritores, actores y actrices, pero al fin y al cabo nosotros también somos público", afirmó el estadounidense.
"En cuanto jurado, los criterios que nos guiarán nos llevarán por el camino de la innovación y la excelencia, y sobre todo valoraremos el filme en sí mismo. Veremos dónde nos llevarán nuestros sentimientos para decidir qué filme nos parece mejor", agregó.
Mann, presidente de un jurado en el que también participan la actriz francesa Laetitia Casta y el cineasta y productor argentino Pablo Trapero, entre otros, apostó por llegar enseguida al consenso para conceder los principales premios de "la Mostra", que se celebrará hasta el 8 de septiembre.
Por su parte, Baratta recordó que esta edición del Festival coincide con el 80 cumpleaños de "la Mostra" y señaló cómo el certamen cinematográfico se mueve en un sector "que no perdona", como es el cine, "a caballo entre el arte y la industria".
Y Barbera, quien regresa este año a la dirección del Festival de Venecia en sustitución de Marco Müller, negó que el que en esta edición no haya películas chinas a concurso suponga un cambio de rumbo en el certamen, al tiempo que descartó que haya habido una intención por su parte en el hecho de que un tercio de los directores invitados sean mujeres.
"No hemos prefijado un número mínimo obligatorio de directoras. No me gustan las llamada 'cuotas rosas'. Hemos elegido filmes en ausencia de prejuicios y nos hemos dado cuenta solo al final de que un tercio de los directores invitados eran mujeres. Si es casualidad o no, solo lo sabremos con el tiempo", indicó Barbera.
"Creo que es un signo de los tiempos, el signo de que las mujeres en la sociedad contemporánea finalmente se hacen cada vez más importantes. Las mujeres asumen papeles de cada vez más responsabilidad. El cine durante un siglo ha sido un ambiente dominado por hombres y finalmente el cine se da cuenta de que hay esta sensibilidad" femenina, agregó.
