Nueva York, 13 dic (EFE).- El fondo de jubilación de los maestros de Nueva York se comprometió hoy a dedicar 1.000 millones de dólares para invertir en proyectos de infraestructura como parte de la reconstrucción del estado después del devastador paso del huracán "Sandy" por la costa este de Estados Unidos.
El plan está impulsado por la Iniciativa Global Clinton, que se propuso financiar la construcción y reparación de infraestructuras públicas por 10.000 millones de dólares en Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut en los próximos cinco años mediante acuerdos con fondos de pensiones, promotores y gobiernos locales y estatales.
Este compromiso "no solamente creará empleos, sino que reforzará las infraestructuras para que Nueva York esté mejor preparado para proteger a las poblaciones vulnerables de las subidas de marea, sequías y las cada vez más frecuentes tormentas que está causando el cambio climático", detallaron en un comunicado.
La iniciativa fue anunciada este jueves en una conferencia en la que participaron el expresidente de EEUU Bill Clinton; el secretario federal de Vivienda y coordinador de la reconstrucción de la zona, Shaun Donovan; el presidente del fondo de pensiones de los maestros de Nueva York, Michael Mulgrew, y el fiscal de cuentas de la ciudad, John Liu.
"Unidos, este trabajo va a beneficiar nuestro futuro no solamente en términos de una mayor eficiencia en los edificios y reducción de la amenaza del cambio climático, pero también de la vida de los profesores y trabajadores de la construcción", dijo el exmandatario estadounidense.
Por su parte, Mulgrew dijo que el fondo de pensiones de los profesores neoyorquinos ha estado "buscando durante meses una estrategia de inversión" que "ayude a solucionar las necesidades de reparar y mejorar las carreteras, puentes, y sistemas eléctrico y de agua de Nueva York".
"El huracán 'Sandy' ha hecho esas necesidades aún mayores, y estoy encantado de poder decir que los profesores de Nueva York están tomando un papel de liderazgo para ayudar a la reconstrucción de la ciudad y el estado", añadió Mulgrew.
"Sandy" tocó tierra en la costa de Nueva Jersey el pasado 29 de octubre, dejando a su paso al menos 125 muertos en todo EEUU, graves inundaciones, millones de hogares sin electricidad y otros miles destruidos, unas consecuencias de las que todavía están tratando de reponerse los ciudadanos.