Al Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación (CAVR) de fauna silvestre del Área Metropolitana del Valle de Aburrá llegaron los primeros animales afectados por la pólvora.
Son tres aves: una con trauma craneoencefálico y otras dos que cayeron de sus nidos por estallidos en Belén y el corregimiento de San Antonio de Prado. Además de una zarigüeya, que lamentablemente cayó de un árbol en la Loma de los Bernal y murió debido a las graves fracturas ocasionadas tras los estallidos.
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“Después de la alborada, ya son cuatro individuos de la fauna silvestre que hemos recuperado, gracias al llamado de la comunidad metropolitana, tres aves, de las cuales una tuvo un trauma craneoencefálico y está en tratamiento en nuestro Centro de Atención, Valoración y Rehabilitación de Fauna Silvestre, y una zarigüeya que murió por la afectación de la pólvora. Hacemos un llamado a no usar pólvora, porque afecta nuestra fauna silvestre”, detalló Andrés Alberto Gómez Higuita, profesional universitario del Grupo Fauna del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Las detonaciones de pólvora causan arritmias, estrés severo, huida desorientada, abandono de nidos y riesgo de atropellamiento, afectando no solo a los animales sino también la estabilidad de los ecosistemas metropolitanos.
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Por esta razón, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá reitera que la pólvora sí afecta a la fauna silvestre y le hace un llamado a la ciudadanía para evitar su uso, así como a reportar cualquier animal silvestre herido a la línea de emergencias 304 630 00 90.
