El problema de las millonarias deudas de las EPS y del Estado con los centros asistenciales mantiene en vilo la atención a los usuarios del sistema de salud en el país.
Pese a que el Ministerio de la Protección Social anunció hace una semana la inyección de 1 billón de pesos al sector de salud para aliviar la grave crisis financiera de los hospitales del país, su situación sigue siendo delicada.
Las deudas con la red hospitalaria por servicios prestados a los usuarios de las EPS de los regímenes contributivo y subsidiado, así como del propio Estado a través del Fosyga y entes territoriales, asciende a 3.7 billones de pesos a diciembre del año pasado.
De esa cifra, según la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (Achc), el 52 por ciento se refiere a deudas que no se pagaron en los plazos estipulados por la ley. Las que más deben son las EPS del régimen contributivo, con una cartera vencida del orden de los 1.3 billones de pesos. El Estado adeuda 610.000 millones de pesos y las del régimen subsidiado 880.000 millones.
Para paliar la problemática, el ministro de la Protección Social, Mauricio Santamaría, ha dicho que desde abril se han girado 1,2 billones de pesos dirigidos al saneamiento de pasivos y temas relacionados con el pago de cartera vieja.
Algunos casos se refieren al Hospital Federico Lleras, de Ibagué, que le adeudan 81.000 millones de pesos, al Hospital Universitario del Valle, que le deben 350.000 millones; el San Jorge de Pereira, que tiene una cartera de 38.000 millones; el Francisco de Paula Santander (Cauca), que espera el pago de 8.160 millones; y la Clínica Sociedad Médica Vida, que espera 1.400 millones de pesos.
El panorama, como se ve, es delicado y es necesario que el Gobierno agilice el suministro de recursos para evitar el colapso en los hospitales del país. Ayer, un acuerdo de los hospitales de la red que ofrece asistencia a más de un millón de usuarios en Bogotá, superó una amenaza de suspender los servicios y sus responsables anunciaron que operarán normalmente al menos por un mes, a la espera de los dineros que les adeudan.
Caso Saludcoop
Por lo menos a un año más se prolongará la intervención de la EPS Saludcoop, anunció ayer el superintendente nacional de Salud, Conrado Gómez Vélez.
La medida fue adoptada tras el informe del agente interventor Wilson Sánchez, quien solicitó la prórroga al señalar que las principales causas de la actual coyuntura son la dispersión de activos, es decir, inversiones permanentes por la EPS en diferentes tipos de sociedades y otras inversiones y las restricciones en el flujo de caja.
Se trata, según Gómez, de mejorar el flujo de dineros mediante acciones concretas como desembargos de recursos, la reducción de gastos administrativos o gastos médicos y un plan de pagos a acreedores que alcanza una suma superior a los 422 mil millones de pesos.
Se informó de cifras preocupantes que deben ser atendidas en el menor tiempo posible. Se mencionó una deuda corriente del orden de los 222 mil millones de pesos y una cartera real de 239 mil millones.
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