[Comentario de LACalle] En Medellín el tiempo dedicado a la reflexión sobre el trato que damos a los animales es de cinco días. Culmina con una caminata en compañía de mascotas, con la esperanza de que se haya levantado otro poquito del suelo la conciencia sobre la dignidad que los animales merecen, porque la tienen. Son también representantes de la vida.
El trato a los animales puede ser sin duda una de las más claras evidencias del nivel de conciencia de una sociedad. En Medellín, durante toda esta semana se hablará y reflexionará sobre ello, pues todo indica que no podremos volver a dormir tranquilos si hemos visto el maltrato atroz a un perro, un gato, un caballo, un delfín partido en dos por un machete.
En Medellín la consigna es “Todos unidos por la vida y el bienestar de los animales", porque el maltrato a estos seres sin palabras es señal evidente de nuestro propio malestar, nuestro propio infierno. Tal vez por eso el filósofo alemán Arthur Schopenhauer advirtió que “el hombre ha hecho de la Tierra un infierno para los animales”.
¡Si no hay conciencia para tratar a los propios seres humanos, qué conciencia habríamos de esperar para el trato a los animales! Aunque, bien mirado, el que se deshace en zurriago contra un caballo que no quiere continuar la marcha, el que patea a un perro o a un gato y lo deja cojo de por vida, está listo para patear a toda la humanidad, de por vida.
Luis Alirio Calle M.
@LuisAlirioCalle
