Según la Unidad de Víctimas, al menos seis mil personas han sido víctimas de violencia sexual como parte del conflicto armado. De ellas, el 86% son mujeres. Adicional a ello, se identificaron 22 personas de la población LGBTI, 574 afrodescendientes, 83 indígenas, 24 gitanos y siete de población raizal.