Pico y placa Medellín

icon
-
icon
-
noun-live-broadcast-1664839 Señal en vivo

Lactosa,un asunto de tolerancia

A pesar de que algunas personas quisieran ingerir mayor cantidad de productos derivados de la leche no lo hacen porque su organismo no puede asimilarlos, lo que produce molestias gastrointestinales.

La verdad es esta, dicen los expertos: las personas debemos consumir algún tipo de lácteo al día. Esa costumbre tiene 11.000 años de práctica y, dice la Organización Mundial de la Salud, OMS, los derivados de la leche son necesarios en todas las etapas de la vida, no solo en la niñez, por su alto contenido de proteína.

Además, este grupo aporta la mayor cantidad y calidad de calcio a la dieta, indispensable en las edades adultas, cuando aumentan los riesgos de osteoporosis.

Los lácteos, en nuestro medio elaborados la mayoría con leche de vaca tipo Holstein y Cebú, también se derivan cada vez en mayor cantidad de otras especies, como la búfala y la cabra. Las estadísticas de las compañías lecheras dicen que los colombianos consumimos al menos dos porciones de lácteos al día, lo cual representa un mercado multimillonario. Pero una preocupación persiste.

Cada vez son más las personas que no toleran la leche y sus derivados. Claudia Cortés, nutricionista de la Universidad Javeriana, explica que esto sucede por un déficit total o parcial de la enzima lactasa, que es la encargada de facilitar la lactosa, es decir la azúcar que se encuentra en la leche.

Según la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional, en Colombia el siete por ciento de la población no consume leche usualmente y solo el 14 por ciento consume este líquido dos veces por día. Los altos índices de desnutrición infantil tienen que ver con ese déficit.

Cortés explica que además de ser un alimento de fácil consumo, también es fuente de vitaminas D, B12 y minerales como el fósforo y el potasio, esenciales para la buena salud.

Según el grado de intolerancia, en el mercado se puede encontrar diferentes alternativas de productos lácteos. Según Cortés, privarse por completo de los derivados de la leche puede ser una mala decisión, “sobre todo cuando hoy se cuentan con tantos recursos”.

Las cifras del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, dicen que el 41 por ciento de los niños no consumen alimentos lácteos. Esto se debe a diferentes causas, entre ellas está la intolerancia, advierte Jaime Velásquez, presidente de la Sociedad de Pediatría Antioqueña, SPA.  Aclara además que esto puede ocurrir a cualquier edad y en cualquier grupo poblacional. Pero en los niños por lo general el daño que produce la intolerancia es temporal.

Leche deslactosada

Se somete a un proceso en el cual se transforma la lactosa en glucosa y galactosa para hacerla de mayor digestibilidad. Es una leche especial utilizada como tratamiento en aquellas personas que padecen de intolerancia. Se obtiene adicionando una enzima llamada lactasa, a la cual se le deja actuar unos minutos. Luego de ese tiempo la lactasa actúa hidrolizando la lactosa, lo que obtiene glucosa y galactosa.  Esta leche se elabora en forma industrial, a la cual luego se le pasteuriza y envasa. Es más dulce, por acción de la enzima lactasa, es de fácil digestión y se le metaboliza más rápidamente.

Alianza con El Mundo