Bogotá, 28 ene (EFE).- La Procuraduría de Colombia solicitó hoy a la juez que debe resolver el fallo sobre la difusión de "Operación E" en el país, que investigue si el protagonista de la película, José Crisanto Gómez, el campesino al que las FARC entregaron el hijo de Clara Rojas, autorizó la narración de su historia familiar.
La producción franco-española, dirigida por Miguel Courtois, estaba prevista que llegara a los cines colombianos el próximo marzo, pero Rojas, que pasó seis años secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), interpuso una tutela (recurso de amparo) por considerar que el filme vulneraba los derechos de su hijo Emmanuel.
La Procuraduría, a través de un comunicado, pidió que en la misma acción de tutela se incluyera como "terceros implicados" a los hijos del protagonista de la película y se determinará si él autorizó el uso de su nombre y el de sus hijos así como la narración de su historia.
Del mismo modo señaló que "para garantizar el derecho a la defensa" el proceso judicial debe vincular, tanto al Ministerio de Cultura, instancia responsable de la autorización del rodaje en territorio nacional, como del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF, entidad estatal encargada de la protección de la infancia.) en razón de sus competencias legales.
Para la Procuraduría, quien aclaró que "no existe aún medida cautelar que haya ordenado suspender la película", es necesario además aclarar quiénes tienen la representación de las productoras extranjeras en el país y quienes son responsables ante las autoridades de la producción y exhibición de la película.
Un portavoz del Tribunal Superior de Bogotá, quien en un principio debía emitir el fallo este mismo mes, informó a Efe que la tutela fue finalmente remitida al Juzgado Primero de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, quien tiene hasta el 30 de enero para decidir si el filme se podrá comercializar en Colombia.
Rodada en las selvas del sur del Colombia, "Operación E", cuenta la historia de José Crisanto Gómez, el campesino colombiano al que las FARC entregaron a Emmanuel, el bebé que tuvo Clara Rojas en la selva, cuando estuvo secuestrada, junto a la entonces candidata presidencial, Ingrid Betancourt, en febrero de 2002.
Según el filme, el niño, gravemente enfermo, fue llevado por Crisanto y su familia a un hospital donde el Estado, ajeno a la identidad del pequeño, se quedó con la tutela.
En el tránsito, el campesino no solo fue perseguido por las FARC, que pretendieron usar al niño como moneda de cambio, sino también por las fuerzas de seguridad y el propio Estado, que lo acusaron de secuestro. Tras cinco años en la cárcel, fue absuelto en abril pasado.
Las productoras de la película, las españolas Tormenta Films y Zircozine, y la francesa Ajoz Films, sostienen que la cinta no vulnera los derechos de Emmanuel porque el argumento de centra en la historia de José Cristanto y su familia, aunque no han precisado si contaron con su consentimiento.