Londres, (EFE).- El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, advirtió hoy a Rusia de que Washington está dispuesto a imponer a Moscú más sanciones económicas si trata de alterar las elecciones en Ucrania, previstas para el próximo 25 de mayo.
En una rueda de prensa en Londres tras participar en la reunión del grupo de Amigos de Siria, Kerry dijo que se debe permitir a los ucranianos elegir su futuro a través de unos comicios libres.
El jefe de la diplomacia estadounidense insistió en que es "vital" que Ucrania tenga unas elecciones "libres y justas".
Antes de participar hoy en las conversaciones sobre la situación en Siria, Kerry celebró una reunión con sus colegas del Reino Unido, Francia, Italia y Alemania para abordar la situación en Ucrania.
El secretario de Estado destacó la importancia de proteger los derechos de todos los ucranianos y pidió a los separatistas prorrusos y a Rusia que respeten el proceso democrático del 25 de mayo, pues -añadió- es la "única manera" de rebajar la tensión en Ucrania.
Al mismo tiempo, Kerry dijo que EE.UU. toma nota de las recientes palabras del presidente ruso, Vladímir Putin, de respetar el próximo ejercicio democrático de los ucranianos, por lo que espera que Rusia "anime" a la gente a votar.
Añadió que Rusia debe permitir a los ucranianos "tener la posibilidad" de votar dentro de ocho días y se mostró a favor de que haya un "esfuerzo concertado" para "dejar atrás la confrontación".
El secretario de Estado hizo estas declaraciones en un momento de tensión en el este de Ucrania pues las regiones insurgentes siguen la senda de Crimea (incorporada a Rusia tras el referéndum de anexión celebrado el pasado 16 de marzo) al crear sus propias instituciones de poder y bloquear las unidades militares.
El principal objetivo del viaje de Kerry a Londres era para reunirse con sus colegas del grupo Amigos de Siria, también llamado "Londres 11", para estudiar cómo ayudar a la oposición siria y mejorar la situación humanitaria en ese país.
Además de EEUU y el Reino Unido, este grupo está formado por los ministros de Exteriores de Egipto, Francia, Alemania, Italia, Jordania, Catar, Arabia Saudí, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos.