Las urgencias del Hospital General de Medellín se reformaron por cuenta de la pandemia. En una zona adecuada con carpas se hace el primer proceso que inicia con la corresponsabilidad del usuario.
Quienes no se autodiagnostiquen, ni lean el pendón tendrán una valoración en lo que han denominado pretriaje. Allí las urgencias se dividen en dos, si tienen síntomas relacionados con COVID-19 pasarán a la zona verde.
Para los pacientes que no tengan urgencias relacionadas con infecciones respiratorias o coronavirus, el hospital adecuó otros espacios que antes eran consultorios y salas de espera, allí se instaló la denominada ruta violeta. En el pretriaje no se realizan pruebas de COVID-19.
