Un comerciante en Medellín pagó 51 millones de pesos por un vehículo que un supuesto vendedor le ayudó a conseguir, luego de dos meses.
Aunque el carro ya está a su nombre, no lo puede disfrutar porque el supuesto asesor se quedó con 11 millones de pesos del negocio, y ya el banco le cobra las cuotas del préstamo que solicitó para concretar la compra.
Hace dos meses Cristopher Andrés Zubiría Ruíz decidió iniciar la búsqueda y compra de un vehículo para complementar su negocio, llamó a una amiga quién le recomendó a un asesor en ventas de carros.
Una vez lo contactó inició el proceso de búsqueda, préstamo, documentación y traspasos, pero cuando se dio el desembolso del dinero comenzó su pesadilla.
Un parte del dinero Christopher la dio al dueño de la compraventa, el préstamo del banco fue desembolsado al dueño del vehículo y lo que hacía falta para concretar el negocio, Cristopher se los consignó al asesor.
El carro ya está a nombre de Cristopher, el banco ya le cobra las cuotas y el carro permanece en custodia, mientras se espera que el asesor pagué los 11 millones de pesos que Christopher le consignó a la cuenta.
El caso ya fue denunciado por estafa a la Fiscalía General de la Nación.
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