Bogotá, 18 oct (EFE).- La canciller María Ángela Holguín, manifestó hoy su "optimismo" ante el proceso de paz abierto entre el Gobierno y las Farc, y su deseo de que todos los colombianos puedan convivir pronto en armonía.
"Estamos llenos de optimismo y rezamos porque esto llegue a un final en el que podamos vivir todos en el mismo país", dijo la ministra de Relaciones Exteriores a los periodistas tras la inauguración en Bogotá de un foro económico entre Asia y América Latina.
El acto en el que participó Holguín se desarrolló al mismo tiempo que la instalación de la mesa de negociaciones en la capital noruega, por lo que reconoció que no pudo escuchar "todo" lo que allí se dijo.
El líder negociador de las Farc y segundo al mando de esa guerrilla, Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", criticó durante su discurso el modelo de desarrollo programado por el Gobierno de Juan Manuel Santos y rechazó el nivel de intervención de las multinacionales en la economía.
Incluso, llegó a considerar que "para el Gobierno están primero las transnacionales que las familias colombianas", sobre lo que la canciller fue tajante: "no voy a comentar sobre lo que diga 'Iván Márquez'".
Por el contrario, se mostró favorable a que un escenario de paz "y sin violencia" incentive la inversión extranjera en Colombia y siga sumando puntos para convertirse en "un país fuera de serie en la región".
"Lo que yo creo es que hay una posición internacional muy fuerte y creo que nos empiezan a ver distinto", opinó la canciller, quien además valoró el impulso que dan las empresas internacionales a Colombia para mejorar en "desarrollo, ciencia, educación y tecnología".
El jefe de la delegación del Gobierno, el exvicepresidente Humberto de la Calle, sí acotó en Oslo durante la rueda de prensa de este equipo negociador que "no se va a discutir el modelo económico" ni "la inversión extranjera" en este proceso de paz.
Para que eso suceda, De la Calle advirtió de que las Farc tendrán que "dejar las armas" primero y cumplir los acuerdos del proceso, con el fin de convertirse después en una fuerza política que se incorpore en la vida democrática colombiana.
Las Farc y el Gobierno volverán a reunirse en La Habana el 5 de noviembre para preparar el contenido de las negociaciones, que no comenzarán hasta diez días más tarde con el problema agrario como primer punto.