Manuela como muchas jóvenes, esperó con ansias cumplir la mayoría de edad, no para ser más independiente o sentirse mayor, sino para cumplir una de las metas de su vida: cargar por primera vez su silleta en el desfile que cierra con broche de oro la Feria de las Flores.
“Mucha gente espera como que cumplir la mayoría de edad y decir voy a ser independiente, voy a poder salir de mi casa, de fiesta, y realmente los silleteros esperamos ser mayor de edad para poder tener la posibilidad de cargar la silleta dentro de Medellín”, cuenta Manuela Londoño Zapata, silletera.
Desde niña, ha vivido entre flores, las ha cultivado, cortado y cargado en cuanto desfile ha podido participar, pero el primer momento quizá más significativo de su vida, está a punto de ocurrir.
“Cada año que iba a participar decía, si gano voy a hacer esta idea, si gano voy a hacer la silleta de esta manera, con esta flor y así y en este momento que tengo el contrato fijo, yo no sé qué hacer todavía”, manifiesta.
A su corta edad sabe que lo más importante para continuar guardando la cultura silletera, es transmitir el amor y la pasión por este oficio, así como el orgullo de ser antioqueño.
“Ser antioqueño es algo que se debe transmitir, como esa fuerza, esa pujanza, que es muy importante para la representación de lo que es Antioquia a Colombia y todo el mundo”, expresa.
Los sueños sí se cumplen, y este domingo, entre el júbilo y el orgullo, independiente de lo que pase, se cumplirá el suyo.
“Flores hay en todo el mundo, silleteros solo en Santa Elena, entonces representar una cultura que no se ve en cualquier parte del mundo es algo mágico, realmente es algo de lo que uno se puede sentir muy orgulloso”, resalta Manuela.
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